Naturalïs torna, pasa por ser el Cubo Rubick de la alimentación. Un distrito donde el vocablo preliminar y capital, la alimentación, se contextualiza, toma forma y aglutina con expresiones análogas como pueden ser la gastronomía, la culinaria o la nutrición, o para ser más lato: la democratización de la comida ad libitum. .
. ¿Dónde –y qué- pueden comer, al unísono, sujetos tan dispares como un vegetariano; un diabético; un deportista; un celíaco; un teinómano; un simple gafapasta, ávido por conocer manjares de otros confines; o por qué no, cualquier hijo de vecino con ansias de saciar su paladar? .
. Una mascletá de ensaladas; nutritivas hamburguesas no al uso; cuencos de frutas exóticas; zumos enriquecidos; tés, platos del mundo o lo ya indicado en el prefacio de estas líneas: un Cubo Rubick ubicado en Numancia nº 31, en las cercanías del Auditorio Alfredo Krauss. Un lustro nos contempla.
1 comentario:
¡Enhorabuena!
Alguna vez espero tener el placer de deleitarme el paladar allí.
Me alegro de que sigáis caminando con paso firme.
Un beso.
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